El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha confirmado su asistencia al Congreso este miércoles para responder a las preguntas de los grupos parlamentarios. Esta decisión se produce tras el aplazamiento de la conferencia de la ONU que estaba programada para la próxima semana en Nueva York, donde Sánchez tenía previsto participar. Fuentes parlamentarias han indicado que el Gobierno se ha puesto en contacto con los diferentes grupos para informarles sobre este cambio y permitir que aquellos que tengan derecho a preguntar puedan presentar sus interrogantes este lunes.
La comparecencia de Sánchez se da en un contexto complicado, marcado por la crisis que enfrenta su partido, el PSOE, debido a la investigación de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) sobre presuntas comisiones en obras públicas. Este escándalo ha llevado a la dimisión del secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, quien dejó todos sus cargos la semana pasada. La situación ha generado un clima de tensión política, donde la oposición ha intensificado sus demandas de responsabilidad al Gobierno.
### La Oposición Exige Respuestas
El Partido Popular, principal fuerza de oposición, ha adelantado que su líder, Alberto Núñez Feijóo, exigirá a Sánchez que comparezca en el pleno del Congreso para dar explicaciones sobre los casos de corrupción que afectan a su administración. Sin embargo, desde el PP advierten que el tiempo limitado de las preguntas parlamentarias no es suficiente para abordar la gravedad de las acusaciones. En caso de que Sánchez no se presente, el PP tiene planes de solicitar un pleno extraordinario en la Junta de Portavoces, con el objetivo de forzar una votación sobre la propuesta de elecciones anticipadas.
Además de las preguntas que planteará el Partido Popular, se espera que el presidente del Gobierno también de respuesta a las inquietudes del líder de Vox, Santiago Abascal, y del portavoz de Esquerra Republicana (ERC), Gabriel Rufián. La presión sobre Sánchez se intensifica, ya que su comparecencia se produce en una semana crucial, en la que se reunirá con sus socios de investidura, quienes han solicitado explicaciones para recuperar la confianza y evaluar la viabilidad de continuar con la legislatura hasta su finalización en 2027.
### Reunión del PSOE y Auditoría Externa
En medio de esta crisis, Pedro Sánchez ha convocado a la ejecutiva federal del PSOE para una reunión programada para mañana, que será la primera desde la dimisión de Santos Cerdán. Esta situación ha causado conmoción dentro del partido, y Sánchez ha anunciado que se llevará a cabo una auditoría externa de las cuentas del PSOE, así como una reestructuración de la dirección nacional del partido. Estas medidas buscan restaurar la confianza tanto dentro de la formación política como en la ciudadanía.
El secretario general del PSOE ha expresado su deseo de pedir perdón a la ciudadanía por las acusaciones que apuntan a la implicación de Cerdán en un grave caso de corrupción, que también involucra al exsecretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos. La situación actual ha puesto a prueba la capacidad de Sánchez para manejar la crisis y mantener la estabilidad de su Gobierno, mientras enfrenta la presión de la oposición y las demandas de sus propios aliados.
La crisis de corrupción que afecta al PSOE no solo pone en riesgo la imagen del partido, sino que también plantea interrogantes sobre la capacidad de Sánchez para gobernar en un entorno político cada vez más hostil. A medida que se acerca la fecha de la comparecencia en el Congreso, todos los ojos estarán puestos en cómo el presidente del Gobierno maneja las preguntas y las acusaciones que se le presenten. La respuesta de Sánchez podría definir no solo su futuro político, sino también el rumbo del PSOE en los próximos meses.