El mercado de valores en España está a punto de experimentar un cambio significativo gracias a la reciente iniciativa presentada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y el operador de la bolsa española, BME. Este nuevo plan, denominado BME Easy Access, busca facilitar el proceso de salida a bolsa para las empresas, permitiéndoles colocar sus acciones de manera gradual y evitando las presiones y las incertidumbres que a menudo acompañan este proceso. La presentación tuvo lugar en la Bolsa de Madrid y ha sido calificada como una iniciativa rompedora en el contexto europeo.
### Un Mecanismo Adaptado a las Necesidades del Mercado
La propuesta de BME Easy Access se presenta como una solución innovadora para abordar el fenómeno conocido como el «síndrome de la campana», donde las empresas se ven obligadas a realizar una oferta pública inicial (OPI) en un corto período de tiempo. Este enfoque puede resultar arriesgado, ya que cualquier imprevisto en el mercado puede afectar la valoración de las acciones. Un ejemplo reciente de esto fue la cancelación de la salida a bolsa de Europastry, que se produjo a pocos días de la fecha anunciada debido a la incertidumbre en el mercado.
El nuevo mecanismo está diseñado principalmente para empresas que tienen una capitalización superior a 500 millones de euros, aunque también se contempla la posibilidad de incluir a empresas más pequeñas. La CNMV se encargará de verificar el folleto de salida a bolsa, pero a diferencia de los procesos tradicionales, no será necesario que las acciones se distribuyan de inmediato. Las empresas tendrán un plazo de 18 meses para colocar al menos el 10% de su capital en el mercado, lo que les permitirá hacerlo de manera más flexible y adaptada a las condiciones del mercado.
Durante este período, las empresas podrán vender acciones en bloques a inversores profesionales, lo que les permitirá gestionar mejor el riesgo y la incertidumbre. Si no logran alcanzar el 10% mínimo de capital flotante al final del plazo, la empresa será excluida sin indemnizaciones para los inversores profesionales. Esta medida busca incentivar a las empresas a salir a bolsa con mayor certidumbre y menos presión, lo que podría resultar en un aumento en el número de empresas cotizadas en el mercado español.
### Un Contexto de Incertidumbre y Oportunidades
El entorno actual del mercado ha sido complicado para muchas empresas que desean salir a bolsa. Factores como la pandemia, la guerra en Ucrania y las tensiones comerciales han generado un clima de incertidumbre que ha llevado a muchas empresas a optar por alternativas como la venta de acciones a fondos de capital riesgo en lugar de cotizar en bolsa. En la última década, el número de empresas cotizadas ha disminuido un 17%, lo que pone de manifiesto la necesidad de un cambio en la forma en que se gestionan las salidas a bolsa.
El consejero delegado de BME, Juan Flames, ha destacado que fortalecer el mercado de capitales es una cuestión de Estado, especialmente considerando los cerca de 10 billones de euros de ahorro acumulados por los particulares en la Unión Europea. A diferencia de Estados Unidos, donde estos ahorros se utilizan para fomentar la inversión empresarial, en Europa muchas empresas terminan en manos de fondos de capital riesgo, lo que limita las opciones de financiación disponibles para las empresas que desean crecer y expandirse.
El nuevo mecanismo ha sido probado en colaboración con bancos de negocios, despachos de abogados y asociaciones empresariales, lo que garantiza que esté bien adaptado a las necesidades del mercado. La CNMV ha señalado que este enfoque reduce el riesgo de ejecución y aporta flexibilidad al permitir que las empresas elijan el momento más adecuado para salir a bolsa, separando los trámites administrativos del momento de la salida real al mercado.
### Un Modelo a Seguir en Europa
La iniciativa de BME y la CNMV no solo busca resolver los problemas del mercado español, sino que también tiene el potencial de convertirse en un modelo a seguir en otros países europeos. Mientras que en Estados Unidos se han explorado alternativas como las SPAC (compañías de adquisición con fines especiales), este enfoque no ha tenido el mismo éxito en Europa. La atención de otros operadores europeos, como Euronext, está puesta en el resultado de este plan español, lo que podría abrir la puerta a la replicación de este modelo en otros mercados.
La implementación de BME Easy Access podría marcar un hito en la forma en que las empresas europeas abordan sus salidas a bolsa, ofreciendo un camino más claro y menos arriesgado para aquellas que buscan capitalizarse en el mercado de valores. A medida que el entorno económico sigue evolucionando, la capacidad de las empresas para adaptarse y encontrar nuevas formas de financiación será crucial para su crecimiento y sostenibilidad a largo plazo.