La Semana Santa se aproxima y con ella, la incertidumbre sobre el clima que acompañará a millones de viajeros en España. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha comenzado a afinar sus pronósticos, advirtiendo sobre un fenómeno meteorológico inesperado que podría afectar las celebraciones y desplazamientos durante este periodo vacacional.
A medida que se acerca la Semana Santa, la AEMET ha señalado que los primeros días de este periodo serán marcados por la inestabilidad climática. La agencia ha identificado una borrasca de gran impacto, conocida como Olivier, que comenzará a influir en el clima español a partir del jueves. Este fenómeno traerá consigo lluvias que afectarán a diversas regiones del país, especialmente en el sur y el oeste de la Península.
El pronóstico inicial sugiere que el Domingo de Ramos podría ser un día más propenso a la lluvia que a las procesiones, lo que podría desanimar a muchos viajeros y devotos. La AEMET ha indicado que las precipitaciones serán generalizadas, y aunque el clima será más cálido en los primeros días de la semana, la llegada de la borrasca cambiará drásticamente las condiciones atmosféricas.
Además de las lluvias, se espera la presencia de un fenómeno conocido como calima o ‘lluvia de barro’, que afectará a comunidades como Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha. Este fenómeno, aunque habitual en algunas épocas del año, se suma a la complejidad del pronóstico, ya que puede alterar la calidad del aire y la visibilidad en las zonas afectadas.
La AEMET ha hecho un llamado a los viajeros para que estén atentos a las actualizaciones meteorológicas, especialmente aquellos que planean desplazarse durante la ‘Operación Salida’, que coincide con el inicio de las vacaciones de Semana Santa. La agencia ha enfatizado que, aunque se espera que las condiciones climáticas mejoren hacia el fin de semana, la situación es aún incierta y podría cambiar en función de la evolución de la borrasca.
En cuanto a la Semana Santa en sí, la AEMET ha pronosticado que las temperaturas serán más frescas de lo habitual, lo que podría afectar a las actividades al aire libre. Aunque se prevé que el norte de la Península reciba más lluvias, el sur podría experimentar un panorama más seco a partir del Jueves Santo, aunque esto dependerá de la evolución del clima en los días previos.
La AEMET ha subrayado la importancia de seguir las actualizaciones meteorológicas, ya que la situación puede cambiar rápidamente. Con millones de personas planeando viajes y actividades religiosas, la previsión del tiempo se convierte en un factor crucial para la planificación de las festividades.
En resumen, la Semana Santa de este año se presenta con un panorama meteorológico incierto, marcado por la llegada de la borrasca Olivier y la posibilidad de lluvias y calima. Los viajeros deben estar preparados para adaptarse a las condiciones climáticas cambiantes y seguir las recomendaciones de la AEMET para garantizar una experiencia segura y placentera durante esta importante celebración.