Las llamas continúan arrasando el puerto Shahid Rajai, el mayor puerto comercial de Irán, tras una explosión devastadora que tuvo lugar el sábado. Este trágico evento ha dejado un saldo de al menos 28 muertos y más de 1,000 heridos, además de causar daños significativos en la infraestructura del puerto. La explosión, que se escuchó a decenas de kilómetros de distancia, se produjo alrededor del mediodía (hora local) en un muelle del puerto, un punto estratégico donde transita el 85% de las mercancías del país.
El puerto, ubicado cerca de la ciudad costera de Bandar Abbas, es crucial para el comercio de Irán, dado que se encuentra en el estrecho de Ormuz, una vía marítima que representa aproximadamente una quinta parte de la producción mundial de petróleo. La magnitud de la explosión ha llevado a las autoridades a declarar tres días de luto en la provincia de Hormozgan, donde se encuentra el puerto.
**Causas y Consecuencias de la Explosión**
Las primeras investigaciones apuntan a un incendio en un depósito de materiales peligrosos y químicos como la causa del desastre. Según informes, el perclorato de sodio, una sustancia utilizada en combustibles sólidos para misiles, podría haber sido el desencadenante de la explosión. Esta información fue proporcionada por una fuente cercana a la Guardia Revolucionaria, el ejército ideológico de Irán.
El presidente Massoud Pezeshkian ha ordenado una investigación exhaustiva para determinar las causas exactas del incidente. Mientras tanto, los servicios de emergencia han estado trabajando incansablemente para controlar el incendio que, aunque está bajo control, aún no se ha extinguido por completo. Imágenes de la televisión estatal muestran aviones cisterna y helicópteros lanzando agua sobre las llamas, mientras que los bomberos utilizan enormes mangueras contra incendios en un esfuerzo por sofocar el fuego.
Las autoridades han tomado medidas drásticas en respuesta a la crisis. Se ha ordenado el cierre de oficinas y escuelas en Bandar Abbas, una ciudad de aproximadamente 650,000 habitantes, y se ha instado a los residentes a permanecer en sus hogares y usar mascarillas si necesitan salir. El Ministerio de Salud ha hecho un llamado para donaciones de sangre para ayudar a los heridos, lo que refleja la gravedad de la situación.
**Impacto en la Comunidad y Reacciones Internacionales**
El impacto de la explosión ha sido devastador no solo en términos de vidas perdidas, sino también en la comunidad local. Las imágenes de la escena muestran un paisaje de destrucción, con vehículos dañados y escombros esparcidos por el área. La agencia oficial de noticias ha publicado fotografías que documentan la tragedia, incluyendo imágenes de rescatistas y vehículos cubiertos de sangre. La explosión fue tan potente que destruyó una fila de semirremolques, lo que evidencia la magnitud del desastre.
La comunidad internacional ha expresado su solidaridad con Irán. La ONU, junto con varios países, incluidos Arabia Saudita, Pakistán, India, Turquía y Rusia, han ofrecido sus condolencias. Este evento trágico ocurre en un momento delicado, ya que Irán y Estados Unidos están llevando a cabo conversaciones nucleares en Omán, lo que añade una capa de complejidad a la situación.
A pesar de la especulación sobre un posible sabotaje, las autoridades iraníes no han hecho comentarios al respecto. Sin embargo, es importante recordar que Irán ha sido objeto de ataques cibernéticos en el pasado, incluyendo un ciberataque atribuido a Israel en mayo de 2020, que tuvo como objetivo el mismo puerto de Shahid Rajai.
La explosión en el puerto no solo representa una tragedia humana, sino que también plantea interrogantes sobre la seguridad y la gestión de materiales peligrosos en instalaciones críticas. A medida que las investigaciones avanzan, la comunidad internacional estará atenta a los desarrollos y a las posibles implicaciones que este desastre podría tener en la región y más allá.