La reciente crisis energética que afectó a España y Portugal el 28 de abril ha desatado una ola de críticas y exigencias de rendición de cuentas por parte del Partido Popular (PP). Este apagón, que dejó a millones de ciudadanos sin suministro eléctrico durante una jornada completa, ha sido calificado por la oposición como un fallo grave del Gobierno de Pedro Sánchez. En respuesta a esta situación, el PP ha anunciado su intención de impulsar comisiones de investigación tanto en el Congreso como en el Senado para esclarecer las causas de este incidente y evaluar la gestión del Ejecutivo en materia energética.
La propuesta fue presentada por Miguel Tellado, portavoz del grupo popular en el Congreso, quien no escatimó en críticas hacia el Gobierno. Tellado argumentó que el apagón era un evento previsible, ya que diversas entidades, incluida la Red Eléctrica de España (REE), habían advertido sobre la vulnerabilidad del sistema energético. Sin embargo, según el PP, el Gobierno optó por ignorar estas advertencias debido a un “sectarismo ideológico” que ha caracterizado su política energética. Para el portavoz popular, este tipo de incidentes no solo son inaceptables, sino que nunca deberían haber ocurrido en primer lugar.
El PP ha manifestado que, aunque no se opone al desarrollo de energías renovables, es fundamental contar con un sistema de respaldo que garantice la estabilidad del suministro eléctrico. En este sentido, han señalado que las centrales nucleares podrían desempeñar un papel crucial como “cinturón de seguridad” ante situaciones de crisis. Esta postura contrasta con la política del Gobierno, que ha priorizado la transición hacia energías limpias, pero que, según la oposición, ha descuidado la necesidad de un sistema energético robusto y fiable.
### La exigencia de una investigación exhaustiva
La creación de una comisión de investigación se presenta como una medida necesaria para el PP, que busca esclarecer las circunstancias que llevaron al apagón. Tellado ha enfatizado la importancia de llevar a cabo esta investigación “con luz y taquígrafos” en el Congreso, donde se espera que la mayoría del PSOE y Sumar rechace la propuesta. Sin embargo, el PP cuenta con la mayoría absoluta en el Senado, lo que les permitiría avanzar con la iniciativa en esa cámara.
Entre las preguntas que el PP desea que se respondan están las razones por las cuales no se declaró una emergencia nacional ante un evento que, según Tellado, era “de manual”. Además, han criticado la falta de información y transparencia por parte del Gobierno, que ha sido acusado de un “apagón informativo absoluto”. Esta falta de comunicación ha dejado a miles de ciudadanos, que quedaron varados en trenes, sin acceso a agua, comida o aire acondicionado, lo que ha generado un clima de descontento y frustración.
El portavoz del PP ha subrayado que es vital conocer la “causa exacta” del apagón para evitar que se repita en el futuro. En su opinión, España, como cuarta economía de la eurozona, no puede permitirse vivir bajo la amenaza de un nuevo corte de suministro, ya que esto podría tener repercusiones económicas graves y poner en riesgo la seguridad de los ciudadanos, especialmente de aquellos más vulnerables.
### La respuesta del Gobierno y el contexto político
Ante las críticas del PP, el Gobierno ha defendido su gestión y ha argumentado que la transición energética es un proceso necesario para abordar el cambio climático y garantizar un futuro sostenible. Sin embargo, la oposición ha señalado que esta transición no debe comprometer la seguridad del suministro eléctrico. La tensión entre el Gobierno y el PP se ha intensificado en los últimos días, y el apagón ha servido como un catalizador para que el partido de la oposición intensifique su estrategia de desgaste político.
El contexto político actual, marcado por la polarización y la lucha por el poder, ha llevado al PP a utilizar el apagón como un arma política. La formación liderada por Alberto Núñez Feijóo ha visto en este incidente una oportunidad para cuestionar la competencia del Gobierno y su capacidad para gestionar crisis. A medida que se acercan las elecciones, el PP busca capitalizar el descontento ciudadano y posicionarse como una alternativa viable ante el Ejecutivo actual.
La situación sigue evolucionando, y se espera que el debate sobre la política energética y la gestión de crisis continúe en el centro de la agenda política. La creación de comisiones de investigación podría ser solo el comienzo de un proceso más amplio de rendición de cuentas y revisión de las políticas energéticas en España. La presión sobre el Gobierno para que asuma responsabilidades y busque soluciones efectivas se intensificará en los próximos días, mientras el PP continúa su ofensiva en el Congreso y el Senado.