En la actualidad, el uso excesivo de dispositivos digitales ha comenzado a ser un tema de preocupación creciente entre padres y educadores. La pedagoga Anna Ramis ha lanzado una campaña titulada «Más vínculo, menos pantallas», que busca concienciar sobre cómo el uso desmedido de las pantallas por parte de los adultos puede afectar negativamente la relación con los más pequeños. Esta problemática no solo se limita a los niños mayores, sino que también afecta a los bebés desde sus primeros días de vida.
La campaña de Ramis se centra en la importancia de establecer un apego seguro entre padres e hijos. Según sus investigaciones, los bebés requieren atención plena, contacto visual y verbal, así como la presencia física de sus cuidadores. Sin embargo, cuando los adultos están absortos en sus dispositivos, esta conexión se ve comprometida. La pedagoga enfatiza que el apego es fundamental para el desarrollo emocional y psicológico de los niños, y que la falta de atención puede llevar a una construcción de autoestima negativa.
### La Teoría del Apego y su Relevancia en la Crianza
La teoría del apego, formulada por el psicólogo John Bowlby, sostiene que los seres humanos necesitan amor y cuidado desde el momento en que nacen. Este vínculo inicial es crucial para el desarrollo de la seguridad emocional y la autoestima en los niños. Ramis explica que, para construir un apego seguro, es esencial que al menos un adulto esté presente y atento a las necesidades del bebé. Esto incluye reconocer cuándo el niño tiene hambre, sueño o malestar, y responder a estas necesidades de manera adecuada.
Sin embargo, el uso excesivo de dispositivos digitales por parte de los cuidadores puede alterar esta dinámica. Cuando un padre o madre está más interesado en terminar un episodio de una serie o en responder mensajes, la atención hacia el bebé se ve disminuida. Esto puede llevar a que el niño sienta que es una carga o una molestia, lo que afecta su desarrollo emocional. La pedagoga señala que muchos padres no son conscientes de cómo su comportamiento con las pantallas impacta en la relación con sus hijos, y es precisamente esta falta de conciencia la que busca abordar la campaña.
### La Dificultad de Desconectarse
Uno de los aspectos más interesantes que Ramis menciona es la tendencia de los padres a utilizar las pantallas como una forma de escapar del aislamiento que a menudo sienten tras convertirse en padres. Las redes sociales y la información en línea pueden parecer un salvavidas, pero también pueden convertirse en una distracción que roba tiempo y atención que debería dedicarse a la crianza. La pedagoga sugiere que, en lugar de eliminar por completo el uso de dispositivos, los padres deben aprender a racionalizar su uso.
La idea de que estar «sin hacer nada» es aburrido ha permeado en la cultura moderna, y esto puede llevar a los adultos a buscar constantemente estímulos externos en lugar de disfrutar de momentos simples con sus hijos. Ramis propone que los padres se tomen el tiempo para estar con sus bebés sin distracciones, permitiendo que ambos se conecten de manera más profunda. Este enfoque no solo beneficia al niño, sino que también puede ser gratificante para el adulto, quien puede encontrar belleza en la simplicidad de esos momentos compartidos.
La psicóloga Heike Freire también resalta la importancia de la conexión emocional en el desarrollo infantil. Ella menciona que los bebés no solo necesitan alimento y contacto físico, sino que también se benefician de la conexión psíquica que se establece a través de la mirada y la gestualidad de sus cuidadores. Si las pantallas interrumpen esta interacción, el desarrollo emocional del niño puede verse afectado.
### Estrategias para Mejorar el Vínculo Familiar
La campaña de Ramis no solo busca crear conciencia sobre el problema, sino que también ofrece estrategias concretas para ayudar a los padres a cambiar sus hábitos. Una de las propuestas es establecer límites en el uso de dispositivos, como reducir el tiempo que se pasa en aplicaciones de redes sociales. Además, se sugiere crear grupos de apoyo entre padres, similar a los grupos de ayuda para dejar de fumar, donde se puedan compartir experiencias y estrategias para desconectarse de las pantallas.
La idea es que, al ser conscientes de cómo las pantallas afectan su tiempo y atención, los padres puedan hacer pequeños cambios que impacten positivamente en su relación con sus hijos. La campaña busca fomentar un entorno donde el vínculo familiar sea más fuerte y donde los niños puedan crecer sintiéndose valorados y atendidos.
En resumen, la campaña «Más vínculo, menos pantallas» de Anna Ramis es un llamado a la reflexión sobre cómo el uso de dispositivos digitales puede interferir en la crianza y en la construcción de relaciones saludables entre padres e hijos. A medida que la tecnología continúa evolucionando, es fundamental que los adultos tomen conciencia de su uso y busquen maneras de priorizar el tiempo de calidad con sus hijos, asegurando así un desarrollo emocional y psicológico saludable para las nuevas generaciones.