La economía española se enfrenta a un panorama incierto, marcado por la reciente comparecencia del gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, ante la Comisión de Economía del Congreso. Durante su intervención, Escrivá abordó la falta de análisis sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones en el informe anual del Banco, lo que ha suscitado críticas y cuestionamientos sobre la dirección que está tomando la política económica del país. La situación se complica aún más con las nuevas previsiones de crecimiento económico, que han sido revisadas a la baja debido a la guerra comercial y otros factores externos.
**La Sostenibilidad del Sistema de Pensiones**
Uno de los puntos más controvertidos de la comparecencia de Escrivá fue su defensa de que el Banco de España no tiene la legitimidad para analizar el sistema de pensiones. A pesar de que este tema ha sido objeto de análisis durante años, el gobernador se mostró reacio a entrar en un debate que considera fuera de su competencia. Esta postura ha generado preocupación entre los grupos parlamentarios, quienes ven en la falta de un análisis profundo sobre las pensiones un riesgo para la estabilidad económica futura del país.
Escrivá, quien anteriormente fue ministro de Seguridad Social y lideró la última reforma de pensiones, argumentó que no se siente capacitado para determinar si el gasto en pensiones es excesivo. Además, evitó abordar otros temas relevantes en la redistribución de la renta, como la reducción de jornada o el salario mínimo, sugiriendo que el Banco no se involucrará en debates donde los datos empíricos no sean determinantes. Esta falta de claridad ha llevado a muchos a cuestionar la dirección que está tomando la política de pensiones en España, especialmente en un contexto donde la población envejece y la presión sobre el sistema aumenta.
La dimisión del director de Estadística, Ángel Gavilán, también ha sido un tema candente. Escrivá intentó desvincular su salida del informe anual, afirmando que no había relación entre ambos eventos. Sin embargo, la percepción de que hay discrepancias internas en el Banco de España sobre la gestión de las pensiones y otros temas económicos sigue latente. La rotación en altos cargos es habitual, según Escrivá, pero la forma en que se ha manejado esta situación ha dejado a muchos con dudas sobre la estabilidad y la independencia del Banco.
**Impacto de la Guerra Comercial en la Economía Española**
El gobernador del Banco de España también lanzó una advertencia sobre la incertidumbre económica actual, que considera más intensa que nunca. En su comparecencia, presentó las nuevas previsiones macroeconómicas para 2025 y 2026, que reflejan un escenario más pesimista debido a la guerra comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea. Según el informe, en un escenario optimista, se espera que el PIB crezca un 2,4% este año y un 1,8% el próximo, cifras que son inferiores a las estimaciones anteriores. En un escenario adverso, el crecimiento podría caer a un 2% y un 1,1% respectivamente, lo que implicaría una pérdida de 160.000 millones de euros en dos años.
Estas previsiones contrastan con las del Gobierno, que sostiene que el impacto de la guerra comercial será mínimo y que la economía española crecerá un 2,6% este año. La discrepancia entre las proyecciones del Banco de España y las del Gobierno resalta la complejidad de la situación económica actual y la dificultad de hacer predicciones precisas en un entorno tan volátil.
Además, Escrivá destacó que la inflación también está en aumento, con una tasa esperada del 2,4% para este año y del 1,7% para el siguiente. Sin embargo, la inflación subyacente, que excluye los precios energéticos, será más alta de lo anticipado, lo que podría complicar aún más la situación económica. La exposición comercial de España a Estados Unidos es limitada, pero sectores como el químico podrían verse afectados debido a la integración de la economía en las cadenas globales de valor.
La situación económica de España es un reflejo de la interconexión de las economías globales y de cómo los eventos externos pueden tener un impacto significativo en el crecimiento y la estabilidad interna. La falta de un análisis claro sobre las pensiones y la incertidumbre económica plantean desafíos importantes que el país deberá enfrentar en los próximos años.