La reciente junta general extraordinaria de accionistas de Banco Sabadell ha marcado un hito significativo en la historia del banco, al aprobar de manera unánime la venta de su filial británica, TSB, a Banco Santander. Este movimiento no solo responde a la necesidad de fortalecer la posición del banco en un entorno competitivo, sino que también se presenta como una estrategia para contrarrestar la OPA (Oferta Pública de Adquisición) planteada por BBVA en mayo de 2024.
La aprobación de la venta se llevó a cabo con una participación notable del 74,8% del capital social del Banco Sabadell, lo que representa el quórum más alto desde 2004. Este respaldo por parte de los accionistas refleja la confianza en la dirección estratégica del banco y su consejo de administración. La operación, que se anunció el 1 de julio, tiene un precio inicial de 2.650 millones de libras esterlinas (aproximadamente 3.098 millones de euros), aunque se estima que el monto final podría alcanzar hasta 3.361 millones de euros, dependiendo del valor generado por TSB hasta el cierre de la transacción, previsto para el 31 de marzo de 2026.
### Implicaciones de la Venta para Banco Sabadell
La decisión de vender TSB se enmarca en un contexto donde Banco Sabadell busca optimizar su estructura financiera y maximizar el valor para sus accionistas. En este sentido, el banco ha argumentado que la operación representa una oportunidad estratégica que beneficiará tanto a la entidad como a sus accionistas. Durante la junta, varios accionistas expresaron su satisfacción con los dividendos anunciados por Banco Sabadell, que superan lo que recibirían si aceptaran la OPA de BBVA. Esta percepción positiva se traduce en un respaldo a la gestión del consejo de administración, que ha sido elogiado por su enfoque proactivo ante la OPA.
El consejero delegado de Banco Sabadell, César González-Bueno, destacó la importancia de la claridad en la información que se presentará en el folleto de la OPA de BBVA, que se espera para septiembre. Los accionistas han solicitado que se especifique si recibirán el 25% del valor del banco en forma de dividendos y recompras, y si este porcentaje podría aumentar al 40% hasta 2027. Esta falta de claridad ha generado inquietudes, especialmente en relación con las sinergias que se podrían generar en caso de que se acepte la OPA, las cuales, según las estimaciones del banco, serían nulas en los próximos tres a cinco años debido a las condiciones impuestas por el Gobierno.
### Aspectos Fiscales de la OPA
Uno de los temas que ha suscitado mayor interés entre los accionistas es el impacto fiscal que tendría la aceptación de la OPA de BBVA. El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, abordó esta cuestión durante la junta, explicando que la operación no se beneficiaría de la neutralidad fiscal. Esto implica que los accionistas tendrían que pagar impuestos sobre la plusvalía obtenida desde el momento de la compra de sus acciones. Para facilitar la comprensión de este aspecto, Oliu mencionó la disponibilidad de una herramienta, a la que se refirió como «trituradora fiscal», que permite a los accionistas calcular el valor exacto de sus acciones y los impuestos que tendrían que abonar si decidieran acogerse a la OPA.
Este enfoque proactivo por parte de Banco Sabadell en la gestión de la OPA y la venta de TSB refleja una estrategia bien pensada para salvaguardar los intereses de sus accionistas y fortalecer su posición en el mercado. La venta de TSB no solo representa una inyección de capital que podría ser reinvertido en el banco, sino que también permite a Banco Sabadell concentrarse en su negocio principal y en el desarrollo de nuevas oportunidades en el sector financiero.
La decisión de vender TSB a Banco Santander también puede interpretarse como una respuesta a las dinámicas cambiantes del mercado financiero, donde la consolidación y la búsqueda de eficiencias operativas son cada vez más relevantes. En este sentido, Banco Sabadell se posiciona como un actor que busca adaptarse a las exigencias del entorno, priorizando la creación de valor a largo plazo para sus accionistas.
La venta de TSB es un paso significativo en la evolución de Banco Sabadell, que se enfrenta a un futuro lleno de desafíos y oportunidades. A medida que el banco navega por este proceso, será crucial observar cómo se desarrollan las negociaciones y qué impacto tendrán en la estructura y estrategia general de la entidad en los próximos años.