En un reciente episodio del popular podcast ‘Call Her Daddy’, Lauren Graham, famosa por su papel como Lorelai Gilmore en la serie ‘Gilmore Girls’, compartió detalles íntimos sobre su vida personal que han resonado con sus seguidores. La actriz reveló que su amor por el café no solo es un rasgo de su personaje, sino también una parte integral de su vida diaria.
La relación de Lorelai Gilmore con el café es icónica. En la serie, su devoción por esta bebida es casi cómica, llegando a expresar que necesitaba «café intravenoso». Graham, en su vida real, también ha cultivado un ritual matutino centrado en el café, lo que demuestra cómo el arte puede imitar la vida de maneras sorprendentes.
Graham explicó que después de un año de trabajo intenso, disfruta de sus días libres en su nuevo hogar, donde ha creado un ambiente acogedor que prioriza su amor por el café. La actriz ha diseñado su espacio de tal manera que la cafetera está convenientemente ubicada, lo que convierte la preparación del café en un ritual que complementa su rutina diaria. Este momento de autocuidado incluye resolver acertijos del New York Times mientras disfruta de su bebida favorita, un lujo que muchos podrían envidiar.
La versatilidad de Graham en sus preferencias de café es notable. Desde disfrutar de una taza en una estación de servicio hasta personalizar su bebida con crema de vainilla y crema batida, su amor por el café abarca desde lo simple hasta lo elaborado. Esta última, que inicialmente reservaba para ocasiones especiales, se ha convertido en un deleite diario que complementa su rutina matutina.
Al abordar la influencia de su amor por el café en el personaje de Lorelai, Graham aclaró que esta característica ya estaba bien establecida en los guiones desde el principio. Las primeras escenas de la serie destacan la relación entre Lorelai y su bebida favorita, especialmente en sus interacciones con Luke Danes, el dueño del diner local. Esta coincidencia ayudó a Graham a conectar con su personaje de una manera auténtica, aportando una capa de veracidad a su interpretación.
Además del café, la actriz también compartió cómo su estilo personal influyó en el vestuario de Lorelai. Un ejemplo notable fue una camiseta que decía «Todo el mundo ama a una chica irlandesa», que usó tanto dentro como fuera del set. Esta prenda tuvo un significado especial para Graham, ya que marcó su primera incursión en Instagram con una selfie en el Día de San Patricio de 2024. Aunque la mayoría de las prendas del personaje fueron proporcionadas por el equipo de vestuario, el guardarropa de Lorelai logró capturar la diversión y la personalidad vibrante que Graham deseaba proyectar, contrastando con su estilo más sobrio en la vida cotidiana.
Las revelaciones de Graham en el podcast no solo reafirmaron su simpatía hacia el café, una de las pasiones más universales, sino que también ofrecieron una perspectiva única sobre la intersección entre la realidad y la ficción en el mundo del entretenimiento. Los fanáticos pueden ver cómo Lauren Graham y Lorelai Gilmore se entrelazan de maneras entrañables e inesperadas, lo que añade una nueva dimensión a la apreciación de la serie y su legado en la cultura popular.