La inmigración se ha convertido en un tema candente en la política del País Vasco, especialmente en el contexto de la llegada de menores no acompañados. Recientemente, el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno, hizo una declaración que provocó una respuesta inmediata del lehendakari, Imanol Pradales. Moreno cuestionó cuántos inmigrantes llegan en patera al País Vasco desde Francia, lo que llevó a Pradales a aclarar que la mayoría de los inmigrantes llegan en autobús desde Andalucía. Esta interacción resalta la complejidad del fenómeno migratorio y la necesidad de un enfoque más matizado en la política vasca.
El PNV, bajo la dirección de Pradales, busca posicionarse en un espacio de “centralidad” en el debate sobre la inmigración. Este partido se esfuerza por evitar la polarización entre quienes minimizan la complejidad del fenómeno y aquellos que adoptan una postura de rechazo hacia los migrantes. Aitor Esteban, presidente de la ejecutiva jeltzale, ha enfatizado que el PNV rechaza la criminalización de los migrantes, abogando por una política que respete la dignidad humana y promueva la integración en la sociedad vasca.
### La Realidad de la Inmigración en Euskadi
El fenómeno migratorio en Euskadi no se limita a la llegada de personas en patera. La realidad es más compleja y se manifiesta en la llegada de migrantes en tránsito hacia otros países europeos. El paso fronterizo del Bidasoa, que conecta Irun y Hendaia, se convierte en un obstáculo para muchos migrantes africanos. A pesar de ser parte del espacio Schengen, el Gobierno francés ha implementado controles que afectan desproporcionadamente a estos migrantes, lo que ha resultado en tragedias, como las muertes de nueve personas en los últimos años, la mayoría ahogadas en el río Bidasoa.
El Gobierno vasco ha atendido a aproximadamente 40,000 migrantes en los últimos seis años, lo que pone de manifiesto la magnitud del desafío. Pradales ha subrayado la necesidad de más recursos para gestionar esta situación, especialmente en el contexto de la demanda de reconocimiento del País Vasco como frontera norte en materia migratoria. Esta demanda busca una distribución más equitativa de los menores no acompañados, un tema que ha generado tensiones con el Gobierno español, que ha fijado un ratio de 32.6 menores por cada 100,000 habitantes.
Además, el traspaso de la gestión de permisos de trabajo a Euskadi ha sido un paso significativo para abordar el cuello de botella que enfrentan muchos migrantes que desean trabajar legalmente. Sin embargo, la anulación por parte del Tribunal Supremo del traspaso de competencias para homologar títulos universitarios extranjeros ha complicado aún más la situación, especialmente en el sector sanitario, donde hay una escasez de profesionales.
### Desafíos y Oportunidades en la Gestión de la Inmigración
La posición del PNV en materia de inmigración ha generado tensiones con sus socios del PSE, especialmente en relación con la apertura de un centro de refugiados en Vitoria. Mientras que los socialistas vascos han solicitado una reducción en la capacidad del centro, el PNV ha argumentado que la apertura de un centro grande no se alinea con su modelo de acogida, que prioriza centros más pequeños y gestionables.
La preocupación por la inmigración ha ido en aumento entre la población vasca, aunque todavía se encuentra detrás de otros problemas como la vivienda y la sanidad pública. Según el último Sociómetro vasco, la inmigración ocupa el quinto lugar en la lista de preocupaciones ciudadanas. Este creciente interés ha llevado al PNV a querer participar activamente en el debate, evitando la incomparecencia ideológica.
Durante su reciente visita a Canarias, Pradales abordó la cuestión migratoria de manera directa, desafiando a aquellos que critican la situación desde una perspectiva cómoda. Subrayó que la migración es un fenómeno complejo que debe ser tratado con un enfoque centrado en las personas, evitando tanto el populismo como el buenismo. Junto con el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, Pradales ha abogado por un plan estructural de inmigración y un protocolo de actuación entre las ONG de ambas comunidades.
El Gobierno vasco también ha mostrado interés en implementar programas de formación en los países de origen, como Senegal y Mauritania, para facilitar una migración más ordenada. Esta iniciativa refleja un enfoque proactivo que busca no solo gestionar la llegada de migrantes, sino también abordar las causas subyacentes de la migración.
La inmigración en el País Vasco es un tema que seguirá siendo relevante en el futuro cercano. Con un enfoque que busca la integración y el respeto por la dignidad de las personas, el PNV y el Gobierno vasco están trabajando para encontrar soluciones efectivas a un fenómeno que es, sin duda, uno de los grandes desafíos de nuestra época.