La multinacional British American Tobacco (BAT), conocida por sus emblemáticas marcas de cigarrillos como Lucky Strike y Winfield, ha anunciado la inesperada dimisión de su directora financiera, Soraya Benchikh. Esta decisión se produce apenas 15 meses después de su nombramiento, lo que ha generado especulaciones sobre las razones detrás de su salida. Benchikh asumió el cargo tras la promoción de Tadeu Marroco, su predecesor, a consejero delegado de la compañía. A pesar de la falta de explicaciones oficiales sobre su dimisión, BAT ha iniciado un proceso de selección para encontrar un sucesor permanente, mientras que Javed Iqbal, actual responsable del área digital e información, asumirá el cargo de manera interina.
La situación se complica aún más considerando que Iqbal ya había ocupado el puesto de director financiero de manera provisional entre mayo de 2023 y abril de 2024. Este cambio en la alta dirección se produce en un contexto donde BAT está realizando importantes inversiones en el sector del vapeo, parte de su estrategia para adaptarse a un mercado en constante evolución. Tadeu Marroco, actual consejero delegado, ha comentado que los resultados del primer semestre del año superaron ligeramente las expectativas, lo que sugiere que la compañía se encuentra en una trayectoria positiva a pesar de la inestabilidad en su liderazgo financiero.
En sus últimos informes, BAT anunció que sus ingresos se situarían en el extremo superior de su rango previsto para el año, con un crecimiento de hasta un 2%. Sin embargo, se prevé que el volumen mundial de la industria tabacalera descienda un 2% en el mismo periodo. En el primer semestre de este año, la compañía reportó un beneficio neto de 4.565 millones de libras (equivalente a 5.286 millones de euros), lo que representa un incremento del 0,4% en comparación con el mismo periodo del año anterior. A pesar de este crecimiento en beneficios, la facturación total cayó un 2,2%, alcanzando los 12.069 millones de libras (13.975 millones de euros).
El rendimiento de BAT ha sido impulsado por un aumento en el número de usuarios de sus productos sin humo, así como un sólido desempeño en el mercado estadounidense, donde su marca de bolsas de nicotina, Velo, ha tenido un impacto significativo. Soraya Benchikh, la CFO saliente, ha expresado su orgullo por su contribución a la compañía desde su regreso a BAT, destacando que ahora es el momento adecuado para embarcarse en una nueva etapa profesional. A lo largo de su carrera, Benchikh ha acumulado una vasta experiencia, habiendo trabajado previamente en la empresa de bebidas alcohólicas Diageo antes de regresar a BAT a principios del año pasado.
Las acciones de BAT han mostrado volatilidad en el mercado, comenzando la jornada con un retroceso del 2,8%, aunque lograron reducir su caída al 1,8% durante la media sesión. A pesar de estos altibajos, en el último año, los títulos de la compañía han experimentado una revalorización cercana al 50%, lo que refleja la confianza de los inversores en la capacidad de BAT para adaptarse a los cambios del mercado y mantener su rentabilidad.
La dimisión de Benchikh plantea interrogantes sobre la estabilidad de la alta dirección en BAT y cómo esto podría afectar la estrategia de la empresa en el futuro. Con el enfoque creciente en productos alternativos al tabaco, como el vapeo y otros productos sin humo, la compañía deberá encontrar un nuevo director financiero que no solo mantenga la continuidad en la gestión, sino que también impulse la innovación y el crecimiento en un entorno competitivo y regulado. La búsqueda de un nuevo CFO será crucial para asegurar que BAT continúe en su camino hacia la diversificación y la sostenibilidad a largo plazo, especialmente en un sector que enfrenta desafíos significativos debido a cambios en las preferencias de los consumidores y regulaciones más estrictas.
En resumen, la salida de Soraya Benchikh de British American Tobacco marca un momento de cambio significativo para la compañía. A medida que BAT navega por un panorama empresarial en evolución, la elección de su próximo director financiero será fundamental para definir su rumbo estratégico y su capacidad para adaptarse a las demandas del mercado moderno. La industria tabacalera, en particular, está en un punto de inflexión, y las decisiones que tome BAT en los próximos meses serán observadas de cerca por analistas e inversores por igual.
